Los interesados en adquirir carne vacuna en el mercado internacional deben, si pretenden comprar volumen, indefectiblemente mirar hacia el Mercosur que, por amplio margen, es la principal región proveedora de esta proteína animal al mundo.
El Mercosur supera los 4 millones de toneladas anuales en exportaciones, muy por encima de las dos otras grandes regiones proveedoras, América del Norte y Oceanía, que se ubican en el eje de 2 millones.
El salto lo dio desde 2019 para atender el impresionante crecimiento de la demanda desde China para compensar —en la medida de lo posible— el faltante provocado por la epidemia de fiebre porcina africana en el país, nada menos que el principal productor y consumidor mundial de carne de cerdo.
La fuerte expansión de las ventas, que superaron por primera vez en la historia los 4 millones de toneladas en 2020, no podrá sostenerse este año. La expectativa, de acuerdo con proyecciones de Faxcarne, es de un descenso en los volúmenes exportados del orden de las 100 mil toneladas carcasa a unos 4,11 millones.
La contracción se da por la prevista disminución de la producción de carne en Brasil, parcialmente compensada por un aumento previsto en los volúmenes de los dos socios menores del bloque, Uruguay y Paraguay.
Brasil atraviesa por una intensa fase de recomposición de existencias que, por el momento, no muestra señales de aflojar. Los precios de los terneros han subido más que los de los animales terminados, lo que alienta a mantener los vientres en el rodeo de cría, reduciendo la producción.
Por lo tanto, la faena se estima en baja de 6%. A su vez, por el momento las proyecciones dan cuenta de un aumento del PBI en Brasil de 3,0-3,5%, lo que alentaría un crecimiento de la demanda doméstica por carne vacuna, dejando un saldo de exportación de unos 2,3 millones de toneladas carcasa, 9% menos que en 2020. Si la expansión de la economía es menor, el mercado interno demandará menos producto y quedará un mayor volumen para la exportación.
En el caso de Argentina la expectativa es de un descenso de la faena de 4% y de una caída de similar proporción del consumo doméstico, por lo que las exportaciones —si no se restringen por decisiones políticas— se proyectan similares a las del año pasado.
Por su parte, la producción y el saldo exportable de Uruguay y Paraguay se proyectan al alza. Para Uruguay las exportaciones alcanzarían 470 mil toneladas carcasa (+13% anual) y para Paraguay 440 mil toneladas (+15%).
Además de esta situación del Mercosur, en Oceanía pasa algo parecido, porque Australia reducirá sus ventas al exterior este año. Por lo tanto, los ávidos importadores, encabezados por China, encontrarán menos producto que el año pasado. Esta coyuntura tenderá a mantener firmes los precios del mercado internacional en el correr de 2021.