Este fin de semana se realizó en Villa Sara, en Treinta y Tres, el Congreso Anual de la Federación Rural, sin la presencia del presidente de la República, Dr. Luis Lacalle Pou y el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Ing. Agr. Fernando Mattos. En la reunión previa y durante el congreso, estuvieron presentes los delegados de cada federada del país.

En los discursos, se han planteado varios temas que aquejan al sector, que parten desde la situación climática donde el año pasado la zona de visitada por el congreso estaba en emergencia agropecuaria por sequía y este año también se encuentra en la misma situación, pero por exceso hídrico. Hasta los ya conocidos, atraso cambiario, competitividad, impuesto del 1% municipal y la caminería rural. 

Sobre este último tema, la gremial calificó que “la caminería rural colapsó” y cuestionó las medidas y multas adoptadas por algunas intendencias en el interior del país. En su discurso, el presidente de la gremial, Jorge Andrés Rodríguez, dijo: “Hemos asistido hace pocos días a lo que llamamos un atropello a la libre circulación”, haciendo referencia a las medidas adoptadas, por ejemplo, por la intendencia de Paysandú.

“Hace 25 años andamos peinando balastro en algunos caminos vecinales”, dijo Rodríguez, quien recordó que el sector productivo ha “multiplicado por cinco la producción” por lo que afirmó que “en ese tiempo nos tenemos que haber dado cuenta de que había que hacer otra infraestructura a nivel a nivel rural”.

El productor hizo una pausa en su discurso, para “mirar al presidente del Congreso de Intendentes” y le preguntó si “no será la hora de pedir disculpas por no acompañar en vez de cobrar multas o poner normativas anticonstitucionales a la libre circulación”.

En este sentido se cuestionó por qué “los productores” tienen que solucionar problemas de gestión como que “la maquinaria municipal funcione cinco de 24 horas. No puede ser que tengamos un recurso limitado y que lo usemos cinco horas de 24, ese es el promedio que trabaja una máquina municipal”.

El presidente de la Federación Rural, también reclamo por el cobro del 1% municipal, que en definitiva debe volcarse a la mejora de la caminería en el área rural. “Es la comodidad del cobro del 1% municipal lo que nos está perjudicando. Somos el único país en el mundo que para vender nuestra producción dependemos de que nos autoricen, de que alguien nos autorice”.

Si bien remarcó que es un “impuesto tremendamente arbitrario e injusto”, indicó que el mismo “no se deroga por el complejo mecanismo que lo rige y la facilidad con que se cobra. Te agarran muy fácil y desarticular todo eso es muy difícil”, acotó Rodríguez.

En este sentido remarcó que se tiene la oportunidad de derogarlo, con la conformación de la Guía Electrónica del Ganado, sin embargo, dijo que “lo que está trancando para que la guía electrónica de ganado salga es cómo metemos el 1%”.

 

Declaración Final del Congreso

La Federación Rural reunida en su 107ª congreso anual en la Sociedad Fomento de Treinta y Tres expresa -en primer lugar- su preocupación por la situación climática extrema ante las abundantes lluvias caídas. Cuando aún no terminamos de solucionar las consecuencias de una sequía histórica, nos enfrentamos críticamente a inundaciones también históricas. Nos adherimos solidariamente con todos los damnificados, especialmente con los productores de la región.

Queda claro que el ¨Plan de Regularización hídrica del norte de Rocha¨requiere una concreción urgente. Nuestra competitividad está seriamente comprometida.

Consideramos muy importante la baja de la inflación lograda; objetivo que debemos conservar. También coincidimos en la libre flotación del dólar. No obstante, se debe reconocer el brutal atraso cambiario que afecta de manera crítica y decisiva la competitividad de los sectores productivos y exportadores. Es indispensable que se compense con alivios fiscales específicos la carga impositiva, como forma de aliviar lo que esta erosiva situación implica.  ¡La producción primaria está incapacitada de trasladar su impacto a otros eslabones de las cadenas productivas! El sector ha demostrado ser solidario en las crisis vividas en este quinquenio, pedimos ser contemplados en esta coyuntura tan excepcional.

Es absolutamente imprescindible mejorar la eficiencia del estado de manera que el déficit fiscal estructural se termine. El tamaño del estado y su eficiencia son dos temas centrales que inexorablemente se deben corregir.

La caminería rural colapsó.

Si bien celebramos el decreto que aprueba la Emergencia Nacional Vial el problema es estructural y de larga data, independiente de las últimas adversidades climáticas y que las mayorías de las autoridades departamentales nunca han lograron resolver.

La libre circulación de bienes y personas es un derecho constitucional que no puede ser avasallado por iluminados decretos municipales. El impuesto municipal a los semovientes del 1%, -repetimos una vez más-,  es un impuesto injusto, arbitrario, dirigido a un solo rubro, extremadamente burocrático, de negativo impacto, que impone trabas inaceptables a la libre disposición de la producción. Volvemos -una vez más- a solicitar su eliminación, ante la inexplicable sordera estatal en este tema.

Respecto del Plan de Erradicación de la Mosca de la Bichera, expresamos el respaldo a nuestro Consejo Directivo por lo actuado y reforzamos nuestra confianza en la gestión de nuestros delegados. Quedamos atentos a la marcha del proyecto, solicitando que los esfuerzos económicos se concentren primaria y prioritariamente en la validación y puesta a punto de la tecnología, disponiendo para esto únicamente de los recursos ya aprobados.

Ante los nulos avances en la concreción del Plan Nacional de Riego, exigimos nuevamente su materialización, por considerarlo estratégico para el desarrollo el país.

Felicitamos el informe de la Coprodec y el ágil respaldo a este del Poder Ejecutivo dando la negativa de la concentración de la industria frigorífica. Destacamos asimismo y felicitamos la rápida y contundente acción de nuestras gremiales.

Finalmente, y en un año electoral, le solicitamos al sistema político que nuestro sector deje de ser visto como una fuente de recursos y que por el contrario se nos aprecie como un socio motor del desarrollo social y económico del país.  Como dice el título de nuestro Congreso ¨El agro es la solución y no el problema¨.