El pasado 9 de enero comenzó a circular un video en las redes sociales y por Whatsapp, que tiene como protagonista una persona que, desde el lecho del río Cuareim, da a conocer la realidad de una sequía que se agrava día a día en el norte, por la ausencia de precipitaciones, pero al mismo tiempo un cause sin agua, con el río totalmente cortado.
La zona donde fue grabado el video fue, según su protagonista, “entre el Capivarí, rumbo al Paso de León, en la zona del Ataque”. En su relato afirma que “no tenemos agua para beber, a pesar de que estamos en el lecho del río Cuareim”.
Consultado al respecto, el Ing. Gonzalo Jauretche, director departamental del MGAP, dijo que “ese video es una realidad parcial” agregando que “hay que tener en cuenta que el río Cuareim históricamente se corta en los veranos, es muy raro el verano que no se corte” y aclaró que existen “varios puntos del río donde se corta, por lo tanto, no es una gran novedad que el lecho del río Cuareim se encuentre cortado en algunos puntos”. El jerarca señaló además que “aún no hemos tenido ningún caso grave hasta ahora de bombeos de las arroceras”.
Por su parte, Guillermo O’Brien, que tiene chacra de arroz con costas al río Cuareim, dijo que la realidad del río es “tan cruda como ese video”. Al mismo tiempo señaló que en los últimos años “no recuerdo que quede alguna chacra que dependa 100% del río y justamente se ha ido dejando porque este video es recurrente, no digo todos los años, pero quizás sí, año por medio”.
El productor explicó que “el río pasa de una creciente a ese estado del video en 15 días, por lo que el arroz fue dejando de ser dependiente del Cuareim”. En este sentido expresó que los productores en general tienen represas y “cuando hay agua en el río, dejan de gastar la represa y usan la del Cuareim, se ha transformado en un pulmón para las chacras que conozco”.
Más allá de la decisión de los productores de ir dejando los bombeos de agua del río, O’Brien remarco que el video “muestra la realidad de lo que es la seca que está viviendo el norte”. “En lo particular hace 26 años que estoy en el norte, no viví la seca del 88-89, pero sí doy fe que esta es de las más feas sin dudas”.