Con el objetivo de garantizar el abastecimiento de carne vacuna en el mercado interno, los ministerios de Desarrollo Rural y de Desarrollo Productivo de Bolivia aprobaron una resolución biministerial suspendiendo de manera temporal la exportación de carne bovina y sus derivados, informó La Razón.

La medida, según los gremios que agrupan a los ganaderos del país, afecta a la economía boliviana y a la reactivación del sector. El ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Remmy Gonzales, remarcó que se tomó la decisión pensando en que este producto llegue primero a las mesas de los bolivianos y que en el caso de que haya un excedente de la producción, se permitirá la exportación. “Lo que se está haciendo es primeramente garantizar el abastecimiento interno y lo que tengamos en excedente lo vamos a exportar”.

La demanda del mercado chino de carne bovina congelada de Bolivia creció 578% en los dos últimos años, beneficiando a los productores ganaderos, en particular de la región del oriente.

China importó en 2019 un total de 2.063 toneladas de carne por un valor de US$ 10,6 millones. Al año siguiente, en 2020, los despachos se dispararon y alcanzaron un volumen de 13.995 toneladas por los que se pagaron US$ 58,6 millones.