La propagación del coronavirus comenzó a afectar a las regiones productoras de carne vacuna en Brasil de una manera más relevante. El impacto de la enfermedad en los frigoríficos, que hasta entonces estaba más concentrado en los centros de cría de cerdos y aves, ya ha llevado a la prohibición de una unidad, consignó Valor.
La Oficina del Fiscal del Trabajo (MPT) informó el pasado viernes que el tribunal determinó la prohibición de una planta de JBS en São Miguel do Guaporé (RO) hasta que la compañía realice test a todos los empleados para la detección de covid-19. Según el MPT, más del 60% de los casos confirmados de coronavirus en el municipio de Rondônia son de empleados de JBS.
Entre las grandes industrias de carne vacuna del país, JBS no es el único que registra un aumento en los casos de covid-19. En Araguaína, la ciudad de Tocantins que registra la mayoría de los casos —casi 1.300— Minerva realizó pruebas rápidas y detectó 55 casos sospechosos entre los empleados. En la planta, el grupo emplea a 730 personas. Para evitar la propagación del virus, la compañía ha estado trabajando en sus unidades con solo el 70% de su capacidad, en promedio.
En tanto, Marfrig, la segunda industria más grande, también registra casos. En el complejo Várzea Grande (MT), en la región de Cuiabá, la compañía tenía hasta la pasada semana 25 casos confirmados. La compañía emplea a 3.000 empleados en la unidad.