Datos de la economía china que no llegaron a colmar las expectativas del mercado, así como el derrocamiento del gobierno de Afganistán elevaron el nivel de incertidumbre en los mercados internacionales, provocando una debilidad de las monedas de los países emergentes, incluyendo al real brasileño.

Además, se sumaron en Brasil algunas incertidumbres internas vinculadas con las posibilidades del gobierno de lograr mayorías parlamentarias para cumplir con sus objetivos. El real en la semana se desvalorizó 2%, lo que tiró hacia abajo el valor medio del boi gordo en dólares, que perdió 7 cents a US$ 3,84 el kilo carcasa.

En los demás países de la región también predominaron las bajas. En Argentina el novillo de exportación perdió 1 cent a US$ 3,73, en tanto que en Uruguay y Paraguay la baja fue del orden de 5 cents a US$ 4,30 y US$ 3,70 el kilo, respectivamente.

El Índice Faxcarne del Novillo Mercosur bajó US$ 5 cents en la semana a US$ 3,86 el kilo carcasa.