La oferta de animales terminados a pasto continúa siendo muy limitada, pero la industria presiona fuerte para bajar los precios de compra, posicionando la demanda por debajo de la oferta. “Se van haciendo negocios a menos plata”, afirmó un intermediario consultado ayer, pero con dificultades para convalidar las referencias de precios que manejan varias industrias.
Hay muchos frigoríficos posicionados desde la semana pasada a US$ 3,70 por kilo carcasa para novillos gordos y US$ 3,50 para las vacas. Sin embargo, el mercado no convalidó todavía estos valores. Los contados negocios de novillos especiales se hacen a US$ 3,85-3,90 el kilo carcasa, dependiendo de la cercanía a la planta compradora. Novillos gordos buenos, pero con carcasas que no lleguen a los 280 kilos, se venden a US$ 3,75-3,80, referencias a levantar de estancia y con 45 días para el pago. Las vacas, si son especiales, pueden llegar a US$ 3,70 el kilo, con un eje en el entorno de los US$ 3,60. Sigue habiendo demanda por vaquillonas para el mercado interno, con precios que van de US$ 3,70 a US$ 3,90, dependiendo de su terminación. Las entradas a planta están cortas, a una semana o menos.
Un intermediario afirmó que aumentó el número de consultas por parte de productores, seguramente preocupados por la tendencia que están tomando los precios, pero todavía sin que ello se refleje en una mayor cantidad de negocios.
La oferta irá creciendo con el avance de la primavera.
Un operador dijo que las pasturas sembradas están mejorando a paso rápido en estos últimos días. Las lluvias previstas para mañana jueves serán fundamentales en algunas regiones del país donde está faltando agua. Parece probable que la industria logre llevar los precios a niveles cercanos al objetivo propuesto si logra mantener a raya la faena en estas próximas 2-3 semanas.