Este miércoles se registró el remante mensual de Lote 21, con un mercado que se mostró ágil y demandante por todas las categorías, pero que se enfrentaba a un particular desafío: ser el primer remate tras el cierre del mercado de Turquía y las nuevas exigencias que impuso el MGAP para la exportación de ganado en pie.
Y eso se notó, ya que si bien se colocó la totalidad de los terneros y a un precio promedio superior al remate anterior, los terneros enteros valieron US$ 0,30 menos que los castrados, lo que refleja ya una incidencia concreta.
En lo que refiere netamente a las ventas, los terneros se colocaron a un promedio de US$ 2,70, siendo 2,66% más alto que la subasta anterior.
Los novillos de 1 a 2 años se vendieron a US$ 2,33, los de 2 a 3 años a US$ 2,16, y los de más de 3 a US$ 2,11.
Las vacas de invernada se vendieron en promedio a US$ 1,89.