La directiva de la Asociación Nacional de Productores de Leche (ANLP) mantuvo esta semana una reunión virtual con el Directorio de Conaprole para abordar diversos temas de la coyuntura. La complejidad para el negocio de exportación y un mercado interno más flojo dejan poco margen para pensar en una mejora del precio para la remisión de abril para sus remitentes.

En diálogo con IT Lechería el presidente de la ANPL, Walter Frisch, comentó que el panorama que pintaron las autoridades de la principal industria láctea del país “fue complicado” con respecto a los precios y los niveles de demanda. Por ejemplo, Brasil no está comprando actualmente, mientras que Argelia (un cliente de peso para Conaprole) “compró poco” porque completó sus stocks con leche en polvo europea y estadounidense. Además, los precios de exportación cayeron alrededor de un 20%.

La cooperativa está vendida hasta mayo a valores de unos US$ 3.000 por tonelada para la leche en polvo, pero los precios que se ven para el segundo semestre apuntan a un piso de unos US$ 2.700 y desde ahí para abajo. “Notamos al Directorio de Conaprole bastante preocupado por ese tema”, alertó Frisch.

Por otro lado, el mercado interno -que había mostrado un buen desempeño en marzo-, ahora en abril está acusando el impacto del frenazo de la actividad económica y el deterioro del mercado laboral. Sin embargo, Frisch destacó que la cooperativa “está andando bien. Hizo los ajustes que tenía que hacer y hay un gran número de trabajadores en seguro de desempleo. En eso del funcionamiento, la productividad, y también sin casos de coronavirus que es un elemento importante”, valoró.