Los principales exportadores de leche en polvo entera colocarán en el mercado internacional 1,94 millones de toneladas este año, lo que implica un aumento de 9% (164 mil toneladas) respecto a 2022, aunque por debajo de los 2,12 millones de toneladas de 2021.

Entre los principales, quienes crecen en las colocaciones en el exterior son Nueva Zelanda y la Unión Europea, que más que compensan la expectativa de caída de Argentina y Australia.

La producción de leche en polvo entera de Nueva Zelanda se pronostica en 1,45 millones de toneladas en 2023, un aumento anual de 4%, pero aún por debajo del promedio de cinco años. El USDA dice que “los mayores rendimientos del suero de leche, los concentrados de proteína y la leche en polvo descremada han hecho que los procesadores reduzcan la producción de leche en polvo entera”. De todas formas, este producto todavía representa más de la mitad de toda la leche procesada para uso industrial en base al equivalente de leche y sigue siendo el principal producto lácteo exportado por Nueva Zelanda en base al valor.

Hasta mayo, las exportaciones neozelandesas son 7% más altas que en 2022 con una fuerte demanda de Argelia (los envíos se han más que duplicado) y los Emiratos Árabes Unidos (+33%). “La demanda continua de estos mercados respaldará las ganancias año tras año, mientras que las exportaciones a China e Indonesia se moderan”, dijo el USDA.

En el caso de China, principal importador mundial, se prevé que la producción de leche en polvo entera aumente a casi 1,2 millones de toneladas debido al fuerte crecimiento de la producción doméstica de leche. Los suministros de leche han superado la demanda de industrial, lo que llevó a los gobiernos locales de las principales regiones productoras de lácteos a asignar fondos para subsidiar la producción de leche entera en polvo.

Dada la pequeña capacidad para la producción de manteca y queso y la alta demanda interna de leche en polvo debido a su mayor vida útil, las empresas lácteas generalmente compran leche cruda y la procesan para convertirla en leche en polvo para su almacenamiento de acuerdo con el “Contrato de Compra y Venta de Leche Fresca”.

El aumento de la producción nacional de leche en polvo entera en China, combinado con los altos precios de importación, ha provocado una disminución significativa (-34%) en las importaciones este año, exacerbada por la Administración General de Aduanas de la República Popular China que anunció que Nueva Zelanda, tradicionalmente el proveedor dominante del producto, estaba a punto de agotar su cuota preferencial para 2023 y que se implementarían medidas de salvaguardia según lo establecido en el acuerdo de libre comercio entre ambas naciones. Las importaciones de Nueva Zelanda han bajado un 45% hasta junio.