La realidad internacional se da de frente con las aspiraciones de los productores uruguayos que, a pesar de las consiguientes bajas que ha marcado el mercado en estas jornadas en el exterior, continúa consultando por negocios o referencias de precios por su lana recién esquilada.
A pesar de las consultas, la demanda está cautelosa y los valores propuestos (que se escuchan entre los operadores) distan de forma importante respecto a las expectativas de precios que se tiene por parte de los productores. En algunos casos existen productores que dicen haber tomado la decisión de esperar hasta mediados de octubre o comienzos de noviembre para ver la evolución de los precios a nivel internacional.
Los operadores consultados en el norte del país dijeron que no han concretado negocios, aún con la necesidad de algún productor de comercializar su lana, que ha terminado resignando su posición de venta a la espera de lo que pueda pasar la próxima semana.
