En un momento donde se ha analizado el avance que tuvieron las lanas finas en su colocación a nivel internacional, dada la disminución de su micronaje, y las dificultades que se observan para la venta de las lanas de 28 micras y más gruesas, en un diálogo mantenido con el Ing. Agr. Roberto Cardellino, de Delta Consultores, el profesional dijo que aún queda margen para que las lanas finas de nuestro país, continúen en este camino de disminuir el micronaje.
En este sentido indicó que además del afinamiento dentro de la raza, también está la presencia del Merino Dohne, que permite aportar una posible línea de trabajo para ir a una producción de lanas finas y muy buena producción de carne. "Algo que entró, se consolidó y está andando bastante bien", dijo Cardellino.
En el caso del Corriedale, "mucha gente ya afinó" y es la que encontrará mejor posicionamiento en el mercado, sin embargo "la otra parte va a andar con una situación de mercado cada vez más problemática".
En el panorama actual para este tipo de lanas, Cardellino recordó que en Nueva Zelanda, "el productor vive básicamente de la producción de corderos, con razas como Romney y cruzas que tienen más de 35 micras y que básicamente dependen del uso en productos como alfombras, etc. Es decir uso para interiores, nada para vestimenta".
Indicó que los productores neozelandeses se encuentran con serios problemas porque "con los precios de estos dos últimos años, no da ni para pagar la esquila, como está pasando en algunos lugares de Europa también".
Para el profesional, "en sistemas con razas más carniceras y prolíficas, se tendrá que considerar la lana como un subproducto y a lo sumo habrá que pensar que nos paguen los gastos de esquila y no mucho más, ni siquiera ese tipo de lanas vale la pena que se acondicionen" explicó.
Según Cardellino, "el stock ovino y la producción ovina en general depende muchísimo más de la producción y el precio de la lana que de la carne ovina. Las condiciones en las cuales criamos el ovino en el Uruguay son mucho más adaptables a un sistema donde la lana es mucho más importante y la carne claramente es un buen subproducto cuando se tienen buenos niveles de reproducción, pero los sistemas especializados en la producción de carne en el país no son más del 15%".