En un momento crucial para la ovinocultura uruguaya, tanto por los valores de la carne como de las lanas gruesas, se abre la posibilidad de exportar corderos enteros y coludos hacia Medio Oriente. En una entrevista realizada por Valor Agregado de radio Carve a Pablo Camilo Valdez, director del escritorio José A. Valdez & Cía, compartió los detalles y las implicaciones de esta operativa.

El consignatario tacuaremboense, destacó la importancia de esta nueva alternativa comercial y resaltó la existencia de una demanda global sostenida, que presenta múltiples oportunidades para la ovinocultura uruguaya.

El dejar animales enteros, tanto lanares como vacunos, siempre es un riesgo para los productores ya que los negocios planteados a nivel país son principalmente para animales castrados y por ende se castiga en el precio este tipo de animales. Por lo tanto, se necesitan certezas que permitan superar ese factor de incertidumbre. Ante este escenario, Valdez destacó la importancia de establecer garantías sólidas para los productores. "La certeza que le podemos dar es que le vamos a dar una seña por cada cordero y un contrato que avale el negocio", afirmó. Esta seña, junto con un contrato detallado, sirve como salvaguardia tanto para los productores como para la firma.

El director de José A. Valdez & Cía hizo hincapié en la importancia de establecer condiciones específicas para el éxito de la operativa. En el caso de los ovinos, explicó que es muy importante tener buenas "condiciones forrajeras" ciertas características en cuanto a las razas ovinas, por ejemplo. A esto se le debe sumar la necesidad de que los corderos cuenten con excelente estado sanitario, incluyendo la vacuna contra Ectíma, para evitar inconvenientes en el cuarentenario, así como en el viaje.

Valdez informó sobre los kilajes requeridos para los corderos que serán exportados. Son "30 kilos individuales para la primera carga entre el 15 y 20 de diciembre y 35 kilos en febrero", al mismo tiempo informó que estos pesos son base y que no existirá problemas por animales más pesados, siempre y cuando tengan la edad correspondiente. Además, subrayó la importancia de que los corderos estén esquilados y cumplan con los estándares sanitarios requeridos. En cuanto a la cantidad de corderos, destacó una estrategia flexible: "Acá en este caso lo que hicimos, en acuerdo con un exportador, es decir, vamos a conseguir los corderos que los productores puedan cumplir". Esta aproximación adaptable busca asegurar la viabilidad de la operación y establecer un mercado a largo plazo. La firma trabajará en conjunto con el escritorio Aramburu & Cía. Ltda.

Respecto a los precios, Valdez dijo que se basarán en la referencia de la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG). "Lo vamos a poner con un precio de 10 centavos arriba del promedio del cordero pesado de la semana de entrega, pero en pie, no a la carne". El contrato, según Valdez, ofrece tanto un piso como un techo de precios. "Poner ACG como referencia más de 10 centavos en pie y ponerle un piso arriba de lo que está hoy, que sería un 1,50 el kilo en pie destarado y un máximo de US$ 2", detalló. Esta estructura busca proporcionar una base de precios segura para los productores, al mismo tiempo un techo que no inviabilice la operativa. La seña prevista en el negocio, para quienes firmen los contratos, será de US$ 5 por animal.