La zafra de reproductores se adelantó a nivel nacional, sin embargo, en el departamento se mantuvo el inicio de la zafra luego de la exposición de Salto. A diferencia del año pasado, se adelantaron las fechas y octubre cerró con las ventas en pista de reproductores el pasado miércoles 25, en el local Carumbé.

Este año se vendieron más toros que en 2022, tras el retorno a las ventas de la cabaña La Magdalena en su remate anual y su destacada presencia en cuanto al volumen ofertado, que termina equilibrando y superando la ausencia del tradicional remate de cabaña Salto, que en esta zafra realiza una venta virtual con la firma Zambrano & Cía.

En los números de esta zafra, se comercializaron 439 reproductores de las razas Angus (239), Hereford (153), Brangus (24), Braford (21) y Charolais (2). El promedio total fue de US$ 3.124, lo que marca una facturación de US$ 1.371.300.  Este año, el 62% de los toros comercializados en Salto, se pagaron por debajo del promedio (272 toros), en una fluctuación de precios que fue desde US$ 8.160 de máximo (por un plantelero de Bayucuá) a US$ 1.500 de mínimo por siete toros de la raza Hereford.

El promedio por raza ha sido de US$ 3.293 para el Angus, US$ 2,819 para el Hereford. En el caso de las razas sintéticas se alcanzó un promedio de US$ 3.175 en el caso del Brangus y US$ 3.451 para el Braford.  Por último, los Charolais, vendidos en pista, hicieron US$ 2.130.

Respecto a 2022

Teniendo en cuenta que, por su volumen de toros, el remate de La Magdalena marca una diferencia importante respecto al año pasado y que la ausencia de la subasta de cabaña Salto, hace lo propio a la inversa. Para comparar los promedios de este año, con respecto a la zafra pasada, omitimos ambas referencias en cada zafra.

En este nuevo contexto, este año se vendieron en los siete remates analizados, un total de 296 toros, es decir, seis reproductores más que en 2022. En este caso, si el promedio de US$ 3.023 representa una baja del 13,3% respecto a la zafra pasada. La recaudación ha sido de US$ 894.900.

Si lo observamos por raza, en el caso del Aberdeen Angus, se comercializaron 183 toros en estos remates, un toro más que la zafra pasada, a un promedio de US$ 3.201 (-13,8%). En el Hereford se vendieron 107 reproductores, nueve toros más, a un promedio de US$ 2.751, lo que implica una baja del 11,5%.

En el Brangus no hubo cambios en la cantidad de toros vendidos, con un promedio a US$ 2,640 (-30,7%) y se vendieron 2 Charolais, cuatro menos que el año pasado, a un promedio de US$ 2.130 (-15,1%).

Promedios por raza

En la raza Aberdeen Angus el promedio más alto fue de cabaña Bayucuá con US$ 3.916, le siguen La Magdalena con US$ 3.596, Don Roberto con US$ 3.528, San Rafael con US$ 2.839, San Sebastián (debutó este año) con US$ 2.487 y La Empastada con US$ 2.314.

En el Hereford, cabaña Don Roberto alcanzó US$ 3.470 de promedio, La Magdalena US$ 2.977, San Rafael US$ 2.769, San Gregorio (Hereford de Tellería) US$ 2.754, La Lucha US$ 2.653 y La Madrugada US$ 1.671 (Con la salvedad que eran toros de campo).

En las razas sintéticas el promedio más alto del Brangus es de La Magdalena en US$ 3.282, seguido por San Rafael en US$ 2.640. Por su parte en el Braford comercializó únicamente La Magdalena en US$ 3.451.

Por último, en el Charolais, al igual que el año pasado, la oferta es de cabaña La Lucha que hizo un promedio de US$ 2.130.