La pasada semana se realizó una reunión entre productores y molinos para definir el precio final de la zafra 2018-19, en la cual no se llegó a un acuerdo entre ambas partes. Las grandes diferencias se encuentran en los componentes que conforman el costo industrial.

A modo de repaso, el acuerdo comercial entre los productores arroceros y la industria tiene dos componentes muy importantes, por un lado el ingreso por las ventas de arroz y en este sentido los números están definidos y son informados por la Dirección Nacional de Aduanas. El segundo componente es el costo industrial y es en el mismo que se generan las grandes dudas e incertidumbres.

Durante la zafra 2018-19, los productores alcanzaron a nivel de las chacras un promedio de 170 bolsas secas y limpias, con un costo de US$ 1.850 por hectárea. En una cuenta simple el costo que tuvieron los productores es de US$ 10,88 por bolsa, por lo que la cuenta está muy por encima del precio provisorio de dicha zafra que está en US$ 9,03.

Desde la Asociación de Cultivadores de Arroz (ACA) se ha venido marcando consecuentemente que el resultado económico del sistema productivo ha registrado cinco zafras con precios por debajo de los costos. En el caso puntual de esta zafra la diferencia entre el precio provisorio y el costo por hectárea deja poco más de US$ 300 de pérdida.

Ahora bien, diferencias existen en todas las zafras sin embargo siempre se logra llegar a acordar entre las partes una salida sin tener que recurrir al arbitraje previsto en el acuerdo. ¿Por qué este año se utiliza este mecanismo?, porque la propuesta de la industria es menor al precio provisorio acordado, lo que incrementaría aún más las pérdidas del productor.

Leomar Goldini, gerente de Saman Uruguay, dijo en la inauguración de la zafra arrocera este año, que durante la zafra pasada hubo una caída en el precio de la exportación por lo tanto eso debería reflejarse en el valor definitivo.

Por el lado del sector productivo se ha señalado que los costos industriales son una verdadera “caja negra” que siempre tiene algunos parámetros que no son posible de analizar claramente. Esto ha llevado que los productores tengan sus dudas sobre los costos y entiendan que la baja de costos planteada por los molinos en definitiva no refleje la mejora generada por la valorización del dólar en el último año y la reestructura de los molinos, cerrando plantas que debido a la caída del área se encontraban ociosas.

Arbitraje

La próxima semana deberían estar definidos los árbitros tanto de los productores como de los molinos para analizar a fondo los diferentes componentes que integran el costo industrial. Si bien no hay plazo para la presentación de los resultados, en oportunidades anteriores ha demorado cerca de cuatro meses.

En la historia del acuerdo comercial, los productores y molinos, no han puesto de acuerdo en cinco oportunidades. La última fue en la zafra 2012-13, es decir hace cinco años.

Zafra 2019-2020

La presente zafra está prácticamente finalizada con un rendimiento por hectárea que se acerca a las 178 bolsas secas y limpias por hectárea a nivel país, en tanto que aquí en el norte del país el rendimiento estaría muy cercano a las 183 bolsas por hectárea.

Los costos de esta zafra se ubican en US$ 1.700 por hectárea. Desde ACA, un directivo dijo que de acuerdo a los análisis realizados desde la gremial, solamente la mejora del dólar ha permitido acortar la diferencia cercana a US$ 300 por hectárea, cerca de un 40%.

Aún en el medio del arbitraje, los productores y molinos deberán volver a sentarse en la mesa de negociación para definir el precio provisorio de la zafra 2019-2020. En este sentido se señaló desde ACA que son dos negociaciones independientes, aunque se reconoció que es muy probable que el precio provisorio no refleje el momento del mercado actualmente.