Mientras se esperan mayores señales de la política que seguirá la Reserva Federal de los Estados Unidos en su lucha contra la inflación, que incluiría según las minutas de la última reunión del organismo nuevas subas de tasas para llegar hasta el objetivo de un índice inflacionario en torno del 2%, los precios de la soja terminaron la rueda de Chicago con bajas por una toma de ganancias de los inversores tras las subas del martes; por la ausencia de nuevas compras chinas, y por algunos pronósticos de lluvias sobre zonas agrícolas de la Argentina que, igualmente, no cambiarán mucho un panorama que lentamente comienza a definirse con números productivos muy negativos en relación con las expectativas iniciales. En rigor, son esos guarismos privados, que ubican la expectativa de cosecha argentina entre 34 y 38 millones de toneladas, los que hicieron (hacen) el mayor aporte para el sostenimiento de la soja en el elevado nivel de precios actual.
El contrato mayo 2023 de la soja en Chicago perdió US$ 3,40 este miércoles, a US$ 566 por tonelada.
Las bajas no fueron mayores por nuevas lluvias que podrían acentuar la demora de la cosecha de soja en Brasil. Al respecto, el lunes la Conab relevó el progreso de las labores sobre el 23% del área apta, frente al 15,4% de la semana anterior y al 33% de igual momento de 2022.
Por ese atraso en la recolección, que se traslada a la carga de buques, en su revisión semanal la Asociación Nacional de Exportadores de Cereales (ANEC) de Brasil estimó las exportaciones de poroto de soja durante febrero en 8,30 millones de toneladas, debajo de los 9,39 millones de toneladas previstos como máximo esperado en su anterior actualización. Este nuevo volumen supera por mucho margen las 944.385 toneladas despachadas en enero, pero queda debajo de los 9,11 millones exportados en febrero de 2022.
En la previa del Foro Anual que el USDA celebrará entre este jueves y el viernes, los privados auguraron la superficie que Estados Unidos destinará a la soja en la campaña 2023/2024 en 35,86 millones de hectáreas, levemente por encima de los 35,41 millones del ciclo anterior, en tanto que la producción la pronosticaron en 122,74 millones de toneladas, arriba de los 116,38 millones de la actual temporada comercial.
Por otro lado, los precios del trigo también cerraron con bajas en Chicago y en Kansas por las lluvias que se registran sobre zonas productoras de trigos de invierno estadounidenses, en particular sobre el centro-este de Kansas y sobre buena parte de Oklahoma, zonas que vienen lidiando con el déficit hídrico desde hace meses y en las que todo aporte de humedad es bienvenido por suelos y cultivos. La posición marzo en Chicago bajó US$ 5 por tonelada, a US$ 271 por tonelada. El maíz también cerró en baja. La posición mayo 2023 bajó US$ 2,5, a US$ 265 por tonelada. Fuente: Granar Research