En la jornada del viernes, el trigo volvió a cerrar a la baja en Chicago por un alivio en las preocupaciones por el suministro proveniente del Mar Negro. La UE trazó un plan para permitir que el grano ucraniano continúe siendo transportado a través de cinco países en el este del bloque; esto tranquilizó al mercado que tenía por las exportaciones vía terrestre de este país, luego de la oposición de los países vecinos.

Las inspecciones de los barcos que transportan grano ucraniano desde los puertos del Mar Negro se reanudaron el miércoles en virtud de un acuerdo negociado por la ONU, aunque hubo más señales de que Rusia podría no permitir que el acuerdo en tiempos de guerra continúe más allá de mediados de mayo.

En tanto, los futuros de maíz en Chicago cerraron la semana también anotando una baja este viernes, producto de operaciones de liquidación de posiciones largas y a causa del mejor clima que se espera para la ventana de siembra de EEUU, que se está desarrollando actualmente. A su vez, las flojas ventas de exportación del jueves aportan presión bajista adicional a este mercado.

La soja no se quedó a atrás y mantuvo su tónica bajista, debilitado por operaciones técnicas y por escasa demanda externa del poroto estadounidense. El USDA informó el jueves que las ventas semanales de exportación fueron de apenas 100.100 t la semana previa, un mínimo de cuatro semanas que estuvo por debajo de las expectativas comerciales. La caída sugiere una pausa en la demanda después de que las importaciones chinas de soja procedentes de Estados Unidos aumentaran un 43% en marzo. La posición mayo de la soja quedó en US$/ton 545 (-US$ 5,5). Fuente: Bolsa de Comercio de Rosario