Con subas generales cerró la semana en el mercado estadounidense, donde el clima sobre las regiones productoras de granos gruesos y de trigos de invierno estuvo en el centro de la escena. Además, las tensiones en la zona del Mar Negro y Brasil fueron factores destacados para el movimiento de los precios.

Resultó positiva la semana para los precios de la soja en Chicago, donde las posiciones julio y agosto sumaron un 1,22% y un 0,84%, al pasar de 521, 48 a 527,82 y de 500,45 a 504,67 dólares por tonelada. También acompañó la tendencia el contrato noviembre, coincidente con el ingreso de la nueva cosecha estadounidense, que subió un 1,31%, tras variar de 464,26 a 470,32 dólares por tonelada. Luego de las importantes pérdidas recientes, donde los fondos de inversión tuvieron protagonismo por la liquidación de contratos, ahora los mismos actores fueron indispensables para que la oleaginosa lograra un balance alcista, sobre todo por las compras concretadas en la rueda del viernes.

Con valores firmes transcurrió la semana el maíz argentino en el mercado físico, donde las propuestas de los exportadores se mantuvieron estables en 210 dólares por tonelada para la zona del Gran Rosario, en tanto que crecieron de 210 a 215 dólares para Bahía Blanca y de 200 a 210 dólares por tonelada para Necochea. En Chicago, los contratos julio y septiembre sumaron un 1,97% y un 1,56%, al pasar de 230,30 a 234,83 y de 208,16 a 211,41 dólares por tonelada. Con la misma lógica planteada en el espacio de la soja, en cuanto a la actividad de los fondos de inversión, que tras las ventas recientes el viernes optaron por operar en modo comprador.

Finalmente, tras las importantes bajas de las últimas semanas, el trigo logró un importante repunte en el mercado estadounidense. En efecto, en Chicago las posiciones julio y septiembre del cereal sumaron un 4,18% y un 4,09%, al pasar de 232,86 a 242,60 y de 237 a 246,70 dólares por tonelada. Fuente: Granar Research