Fue un primer semestre de mucha actividad en el mercado de celulosa, protagonizado por fuertes alzas en los principales puertos tanto asiáticos como los situados en el viejo continente. La reactivación de las principales economías causó una alta demanda del commodity, acompañada por una oferta intencionalmente limitada y el deseo de los mayores productores a nivel mundial de aprovechar la circunstancia para aumentar el valor por tonelada de la pasta proveniente del procesamiento de árboles.

En julio la tendencia tuvo un quiebre y la celulosa de fibra corta y fibra larga en los principales puertos chinos, que registró un aumento de 52% y 37% en US$/t en el primer semestre respectivamente, quebró la tendencia y registró una caída respectiva de 12% y 8%. Sin embargo, en Europa los precios se han mantenido estables, incluso con algunas leves subas.

La última cotización posiciona la celulosa de fibra corta en Europa a US$/t 1.140 y la de fibra larga a US$/t 1.338. Por su parte, la celulosa de fibra corta en China es de US$/t 667 y la larga de US$/t 851.

Desde mediados de junio se percibe una menor demanda desde Europa y América del Norte, lo cual debilita el mercado y hace pensar que las bajas en China se dan como consecuencia de un mayor flujo de materia prima al continente asiático. Por cierto, la demanda en China es estable y los precios de los princiaples productos se mantienen a la baja, factores que colaboran a la depresión de los valores.