Desde Shanghái

La planta de Copayán fue la primera en Uruguay en quedar habilitada para la exportación directa de los estómagos bovinos (mondongo y librillo) a China. El primer embarque ya zarpó y en estos momentos está en el agua. “La expectativa es ver cómo se da el suceso de ingreso a China, cuál es la aceptación del producto, y una vez que se haya cumplido esa etapa intentaremos profundizar las negociaciones y ponerle el mayor valor posible al producto que, en definitiva, permite ser más competitivos al momento de ponerle valor a la hacienda”, dijo desde la feria del Sial en Shanghái Fernando González, principal de la industria rochense.

González estimó que la diferencia de precio entre ingresar directo con los estómagos al mercado chino y las otras opciones comerciales (mercado interno, algunos países de África, Hong Kong) es del orden de 40% más de valor. Para el industrial, una vez el producto esté testeado en destino, seguramente “vamos a tener un valor agregado mayor a ese porcentaje”.

Al valorar el desarrollo de la feria, González dijo que se llevó adelante con una dinámica “muy tranquila, fría. Hoy el mercado no permite desarrollar negocios de la forma que era usual en China, pero hay que estar presentes y acompañar a la espera que este mercado vuelva a dinamizarse”.

Para González, “la continuidad del mercado está fuera de discusión, pero los niveles de precios que se pueden manejar están muy distantes de las necesidades que tenemos en Uruguay como consecuencia del precio de la materia prima”. El problema no es que China esté demandando cantidades inferiores de carne, sino que hay actores nuevos interviniendo en el mercado, con volúmenes muy importantes, precios muy competitivos. “Uruguay está desfasado en la región, principalmente con Brasil, que es nuestro competidor directo. Mientras esta realidad no cambie, va a ser muy difícil la participación plena en China”, aseguró.

Respecto a la situación de la oferta de hacienda en el departamento de Rocha, donde está ubicada la planta, González dijo que “se restringió mucho por las condiciones climáticas que complican a los productores al momento de preparar los lotes, lo que lleva a diferir el momento de venta, por lo que ha mermado mucho la oferta de hacienda y se afirmaron los precios”.

Para el principal de Copyán, en el segundo semestre del año la previsión es tener “un poquito menos de oferta, pero siempre con la expectativa de que mejoren los mercados, porque el volumen de hacienda no va a crecer, el costo país nos está complicando a todos (industriales y productores), así que la única alternativa para paliar esa situación son valores internacionales más altos”.