La Unión Europea (UE) anunció en la Organización Mundial del Comercio (OMC) que no pospondrá la aplicación de su ley antideforestación, rechazando las presiones de países exportadores de productos agrícolas, como Brasil. Esta posición podría desembocar en un gran enfrentamiento en el escenario comercial internacional el próximo año.
En una reunión de la Comisión de Agricultura la UE fue bombardeada con críticas. Pero desafió el clamor de los exportadores e insistió en que la legislación (EUDR, en la jerga comunitaria) entrará en vigor el 30 de diciembre de este año y “cualquier aplazamiento requeriría un cambio legislativo”, algo que “no lograría nuestro objetivo de proporcionar rápidamente previsibilidad jurídica a los operadores”.
Utilizando esta lógica legal, la UE enfatizó que está “centrada en garantizar que todos los elementos necesarios para la implementación del reglamento estén listos a tiempo, incluida la orientación para los operadores económicos y los estados miembros”.
La ley de la UE, que se espera que entre en vigor dentro de tres meses, tiene como objetivo prohibir el acceso al mercado comunitario de seis productos básicos (carne de vacuno, soja, café, aceite de palma, madera y cacao, así como sus derivados) producidos en zonas deforestadas tras finales de 2020.
Brasil es uno de los mayores proveedores de la UE de la mayoría de los productos afectados por la legislación, que corresponden a más del 30% de las exportaciones brasileñas al mercado europeo. La ley tiene el potencial de causar grandes daños al comercio en Europa a partir de 2025, consignó Globo Rural.