La meteórica escalada que sufrieron los precios de importación de carne en China a principios de noviembre quedó atrás y dejó lugar a una fuerte corrección que se comió todo lo que subió en esos días. La actitud ahora es de una demanda mucho más cautelosa, la que podría mantenerse en estas condiciones por varias semanas más, hasta tanto quede atrás el Año Nuevo chino a fines de enero. Sin embargo, las necesidades de importación seguirán en 2020 tan fuertes como en este año que termina.

Como se suele decir, los árboles no llegan hasta el cielo. En algún momento los mercados corrigen y es lo que pasó ahora. Varios negocios ya concretados están siendo cancelados y no se está cumpliendo con el envío de los adelantos. Se aduce que las empresas que financian estas operaciones de comercio exterior dejaron de otorgar créditos. Los tres o cuatro agentes que ofrecen servicio para realizar las importaciones a través de ellos, y que financian hasta el 70% de la operativa, han suspendido esta modalidad por temor a la falta de cobro. Esto, lógicamente, produjo un congelamiento de la operativa.

“Prevemos que el mercado debilitado puede durar hasta febrero, pasado el Año Nuevo en China”, dijo a Faxcarne el analista chino Gerrard Liu, integrante del Meat International Group (MIG), consultora que analiza en profundidad los mercados de la carne en ese país.

Liu enumeró una serie de razones por las que los precios tuvieron las fuertes caídas constatadas en las últimas semanas, en general “de 10-20%, pero hasta 25% para algunos ítems”.

Desde el lado de la demanda, las plantas procesadoras ya culminaron las compras necesarias para el Año Nuevo Chino. Con la suba de precios de la carne, hay dudas en cuanto a cómo se comportará la demanda en las fiestas. Por lo tanto, se esperará a ver qué stocks quedan después de las celebraciones.

A su vez, la oferta sigue siendo abundante. “Prevemos que las importaciones en diciembre serán de unas 190 mil toneladas, estableciendo otro récord, 35% más abultadas que en octubre y con un crecimiento anual de 80%”, dijo Liu. Solamente desde Brasil zarparon en noviembre para China 83 mil toneladas de carne vacuna congelada, embarques que en una alta proporción estarán llegando a destino en el correr de este mes.

Además, hubo correcciones a la baja en los precios de las demás carnes que también impactaron sobre el mercado de la carne vacuna. El integrante del MIG dijo que el precio del cerdo bajó debido a que cayó el consumo y a que el gobierno liberó mayores volúmenes de sus stocks.

Más allá de esta corrección, nada hace prever que el mercado deje atrás la firmeza en el mediano plazo, dado que la situación de escasez de proteína animal en China —y todo el sudeste asiático— derivada de la epidemia de fiebre porcina africana seguirá pesando sobre el mercado. El año 2020 será de intensa demanda desde China en el mercado internacional, absorbiendo todo lo que sea posible.