Los futuros de soja y maíz en Chicago perdieron terreno en el inicio de la semana, con las expectativas de condiciones climáticas favorables para los cultivos en EEUU y la disminución de la demanda en China, el principal importador, que pesa sobre el mercado.

El contrato de soja de noviembre perdió US$ 15 a US$/t 519, en tanto que el de maíz a diciembre bajó US$ 6 a US$/t 247. En el caso del trigo, el contrato de diciembre bajó solo US$ 2 a US$/t 300.

Se ensombreció el panorama económico en China, con reportes de ventas minoristas, actividad industrial y desempleo que muestran un fuerte impacto de la política de cero COVID. En respuesta, el Banco Popular de China recortó las tasas de interés clave, lo que generó preocupaciones sobre una recesión global. Una contracción de la economía de China, por mucho el mayor comprador de soja de EEUU, podría frenar la demanda de productos básicos estadounidenses.

Por su parte, las previsiones meteorológicas de lluvia en Estados Unidos para las próximas semanas podrían ayudar a los cultivos de soja, lo que aumenta la presión bajista sobre los mercados.