La sequía está pegando muy fuerte en la producción, tanto en nueva Zelanda como Australia, en ambos países la remisión a Fonterra se redujo en un 10% durante el mes de abril, comparando con el mismo período del año anterior.
Esta baja en la producción primaria coincide con un período de aumento de las exportaciones del gigante lácteo, que en marzo aumentaron un 27% interanual en Nueva Zelanda, aunque sus exportaciones desde Australia cayeron un 3% en el mismo mes.
A principios de mayo, Fonterra recortó su expectativa de ganancias anuales y anunció que cerraría una instalación de más de 100 años en Australia, ya que el clima seco y los mayores costos continuaron minando sus operaciones. Estos datos llevaron durante la semana pasada a una caída en sus acciones de un 2,5%, registrando un mínimo histórico para la empresa.
Fuente: edairynews.com