En el lanzamiento oficial de la Zafra Ovina 2025, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Dr. Alfredo Fratti, destacó el papel histórico y actual del sector ovino como eje de desarrollo productivo y arraigo rural en Uruguay. Fratti comenzó su intervención evocando su vínculo personal con la actividad ovina y la historia del país, cuando el stock superaba los 26 millones de lanares.
“Comíamos oveja vieja y de charque porque la heladera si te he visto no me acuerdo”, relató, resaltando cómo su propia experiencia en su infancia lo vincula a los desafíos del rubro.
El ministro aseguró que, pese a las fuertes restricciones económicas, su gestión apuesta a la eficiencia técnica y al trabajo coordinado. En esa línea, subrayó la designación de profesionales con trayectoria al frente de áreas clave: Gustavo Garibotto en Recursos Naturales y Gastón Escayola en INAC.
Mercados y señales
Uno de los ejes centrales de la estrategia ministerial es la diversificación de mercados. Fratti anunció la apertura del mercado de Ucrania para carne ovina con y sin hueso, y mencionó avances hacia el mercado mexicano. También destacó su participación en ferias en China y Japón, donde Uruguay fue “el único país con un ministro de Estado presente”, y se gestiona un hermanamiento de Melo con una ciudad china de 24 millones de habitantes.
Respecto a las tendencias globales, el jerarca señaló una creciente demanda de carne ovina y lana fina, e instó a los productores a interpretar las señales del mercado. En este sentido dijo “no maten al mensajero” y afirmó que el mundo está pidiendo carne ovina de calidad y lana fina. Si bien reconoció que cada establecimiento es distinto, remarcó que el deber del gobierno es transmitir lo que el mundo está pidiendo.
Medidas tributarias
En materia impositiva, Fratti informó que se trabaja junto al Ministerio de Economía para permitir que los productores que tributan IMEBA puedan descontar IVA sobre costos como transporte y servicios técnicos, en tanto que con relación con el IMEBA sobre lana, dijo que está a estudio entre ambos ministerios.
También anunció que existe un acuerdo a nivel de gobierno para derogar el 1% a la venta de semovientes, un reclamo histórico del sector productivo. En este sentido dijo que tras la reciente asunción del nuevo Congreso de Intendentes, se avanzará en este tema con los gobiernos municipales. “No está en la voluntad de este ministro ni de este gobierno recortar los recursos de las intendencias”, aclaró, indicando que se buscará una fórmula que equilibre el apoyo al productor y la sostenibilidad de los gobiernos locales.
Sanidad
El ministro calificó la bichera como un “problema” y detalló la caída del acuerdo con Panamá, aunque destacó un nuevo enfoque desde INIA, donde se ensaya una modificación genética de la mosca. Sobre la garrapata, fue más enfático: “Es el principal problema nacional”, señalando que incluso afecta a ovinos y ha generado rechazos de contenedores exportados. En consecuencia, el gobierno ha redireccionado préstamos internacionales para priorizar el combate a este flagelo.
En paralelo, el programa Procría, orientado a aumentar el índice de procreos en el rodeo vacuno, también incluye al rubro ovino. Fratti reconoció que los gobiernos anteriores han fallado en mejorar el porcentaje de procreo bovino, que se ubica en 65 % a nivel nacional y 55 % al norte del Río Negro, y remarcó que el programa apunta a productores con predios de 100 a 1250 hectáreas, la mayoría con sistemas mixtos.
Arraigo social
En su análisis, el ministro resaltó que el rubro ovino es clave para el arraigo rural, solo superado por la lechería. “Después de la lechería es el que más radica personas”, afirmó. A diferencia del ganado vacuno, el ovino requiere presencia continua, especialmente durante la parición de corderos. En ese contexto, subrayó el rol del Instituto Nacional de Colonización, donde gran parte de los colonos están vinculados a la actividad ovina.
En la parte final de su exposición, el ministro enfatizó que las condiciones favorables del mercado son coyunturales, y que Uruguay necesita invertir más para acercarse a referentes como Australia y Nueva Zelanda. “Estamos muy lejos de lo que tendríamos que invertir”, admitió. Sin embargo, aseguró que el gobierno trabaja “en silencio pero avanzando” para anticiparse a nuevas exigencias globales, como regulaciones por desertificación o normativas sobre bosque indígena.