La raza Aberdeen Angus representó el 61% de los toros vendidos, mientras que los Hereford sumaron 25% y las razas sintéticas el 11% (Braford y Brangus). En las cuatro razas se han vendido más toros que el año pasado.
En el caso del Aberdeen Angus, se vendieron 3.718 toros a un promedio de US$ 4.189, subiendo un 10,3% el volumen y 24% en valor, respecto a la zafra pasada. Durazno (504), Tacuarembó (434) y Cerro Largo (335) fueron los departamentos donde se vendió la mayor cantidad de ejemplares de la raza.
Los 1.533 toros Hereford, entre mochos y astados, alcanzaron un promedio de US$ 4.319, se vendieron 100 toros más y un aumento del 28,7% entre zafras.
Dentro de la raza Hereford se comercializaron 1.308 toros mochos a US$ 4.313 de promedio, mientras que los astados fueron 225 toros a US$ 4.355. Se registró una suba del 30% en el valor de los mochos y del 24% en los astados.
Por su parte, las razas sintéticas sumaron 690 toros, siendo 190 Braford a un promedio de US$ 4.280 (+33%), mientras que los 500 Brangus promediaron US$ 3.915, con una suba del 5% en la cantidad de toros y del 16% en su cotización. Los departamentos con mayor cantidad de toros vendidos de estas razas fueron Durazno, Cerro Largo y Artigas.


