El grueso de la zafra de toros de las distintas cabañas prácticamente ya fue comercializado, con un volumen de ventas y valores que estuvieron por encima de lo esperado para varios operadores dado el complejo panorama que enfrentaba la ganadería uruguaya al inicio de esta primavera, tras el golpe de la sequía, la baja del tipo de cambio y de los valores del mercado ganadero.
De acuerdo al relevamiento de Informe Tardáguila, con casi 5.300 toros vendidos al 4 de noviembre, el valor promedio de colocación se ubicó en US$ 3.100 por toro, valor 8,5% inferior al año pasado (US$ 3.390), con una facturación bruta de US$ 16,3 millones.
La raza Angus dominó ampliamente la agenda de los remates con casi el 60% de las ventas (3.106 toros, a US$ 3.059 de promedio), seguido por Hereford con 28% (1.450, a US$ 3.228), y Brangus 7% (382, a US$ 3.135).