La fertilización de campos naturales con fósforo ha sido un tema de interés y debate en el sector agropecuario uruguayo desde hace muchos años, con posiciones encontradas tanto a nivel de productores como de técnicos. En la reciente revista del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) se presentó un trabajo de investigación, liderado por el Ing. Agr. MSc. Gerónimo Cardozo, del área de Pasturas y Forraje, que buscar responder la interrogante propuesta en su propio título: “¿Fertilizar el campo natural con fósforo?”.

El trabajo de los profesionales de INIA abarca estudios realizados entre 1968 y 2016, que bajo la utilización de la herramienta de metaanálisis aporta luz sobre la efectividad de esta práctica en los campos naturales, recurso primordial para la producción de carne y lana en Uruguay.

De acuerdo con el informe, los pastizales naturales, ricos en diversidad de especies, han sido la base de la ganadería en la región y, sin embargo, la limitada producción invernal y la baja calidad del forraje durante otras estaciones han llevado a implementar diversas estrategias de intensificación, entre ellas la fertilización con fósforo.

El metaanálisis realizado por los técnicos del INIA, que incluyó 285 comparaciones entre parcelas con y sin fertilización, muestra que en el 74% de los casos no se observó un aumento significativo en la producción de forraje con la aplicación de fósforo.

El incremento promedio de producción fue de apenas 399 kg/ha/año, 15% por encima de las parcelas sin fertilizar. Por otro lado, la concentración de fósforo en el forraje sí aumentó en el 59% de los casos, con un incremento promedio del 36%. Sin embargo, la relación N:P bajó significativamente, indicando una limitación por nitrógeno más que por fósforo.

Estos resultados sugieren que, en la mayoría de los casos, la productividad del campo natural no está limitada principalmente por la disponibilidad de fósforo. Además, el consumo excesivo de fósforo sin un aumento correspondiente en la producción de forraje indica que la fertilización con fósforo podría estar limitada por la falta de nitrógeno en el suelo.

El estudio también destaca que la respuesta a la fertilización no está fuertemente influenciada por variables como el contenido de materia orgánica, el pH del suelo o la capacidad de almacenaje de agua. Sin embargo, el aumento en la concentración de fósforo en las plantas se asoció con el nivel de fertilización aplicado, el contenido de arcilla y la capacidad de almacenaje de agua del suelo, entre otros factores.

En conclusión, la fertilización con fósforo en campos naturales no es una estrategia recomendada para la intensificación de la producción. Los bajos niveles de extracción de fósforo en los sistemas ganaderos basados en campos naturales sugieren que su agotamiento es poco probable a corto plazo. Además, los riesgos ambientales asociados a la pérdida de biodiversidad y de fósforo del sistema superan los beneficios potenciales.

En lugar de fertilizar el suelo, se recomienda la suplementación directa de fósforo a los animales en las categorías y momentos en que más lo requieren, como una estrategia más eficiente y sostenible. El uso de fósforo podría ser considerado solo en situaciones donde el nivel de nitrógeno en el campo natural haya aumentado significativamente y el fósforo se convierta en un factor limitante.