El frigorífico Daymán Meat, como desde el inicio del evento, fue el escenario del posmorten del Salto Ovino, con la presencia de 33 carcasas en el gancho que marcaron muy buenas conformaciones carniceras y con muy buenos resultados en los cortes de más valor. Si bien, como es tradicional, los biotipos carniceros son lo que se colocan en la punta de los resultados, también se destacó por parte del jurado, las carcasas de biotipos doble propósito como el Corriedale y hasta el Merino Australiano.
Los jurados en el posmorten fueron los mismos que calificaron en pie: la Dra. Alba Gallo y el Dr. Fernando Rovira (ambos de INAC) y el Ing. Agr. Jorge Aguerre (extécnico del SUL).
En la categoría Cordero Pesado Precoz, subcategorías carniceras, el mejor ejemplar fue de la raza Texel, expuesto por Suc. José. F. Da Silva. Se trató de un animal de 43,5 kilos en pie, con un peso canal de 24,2 kilogramos, lo que deja un 55,6% de rendimiento. Esta carcasa además fue elegida como la mejor del concurso. Si bien este animal es propiedad de la firma ganadora del concurso en pie, perteneció al segundo lote de la categoría, en tanto que el animal del mejor lote en pie fue el segundo en el posmorten de la categoría.
En el Cordero Precoz, subcategoría Doble Propósito, la mejor carcasa correspondió a un Romney Marsh de María Angélica Devoto, que pesó 43 kilos en pie y obtuvo 23,3 kilos en la canal, con un 54,2% de rendimiento. Al final del concurso se convirtió en la segunda mejor carcasa.
Para la categoría Cordero Pesado, subcategoría Carnicera, la mejor carcasa fue de un Hampshire Down, expuesto por Juan Manuel Bortagaray. Este animal peso 61,5 kilos en pie, y con un rendimiento del 48,5%, quedo con una canal de 29,8 kilogramos.
En tanto que la mejor carcasa para la categoría Cordero Pesado, subcategoría Doble Propósito, fue expuesta por Los Tordos SA, con un Corriedale que pesó 44,5 kilos en pie, y con un 53% de rendimiento quedó en 23,6 kilos de canal. Esta fue, además, la tercer mejor carcasa del evento.
La Dra. Alba Gallo, técnica de INAC, dijo que “las carcasas fueron muy parejas, nos dificultaron mucho la elección. Había muy buenos animales”. Respecto a las características que determinaron las mejores reses, explicó que “se mira la conformación, el desarrollo muscular respecto al esqueleto, principalmente en la zona del dorso y el trasero que es donde están los cortes de mayor valor”.
Otro de los puntos que los técnicos tuvieron en cuenta la hora de evaluar las carcasas, fue el peso de las mismas, colocándose un rango entre los 16 y 24 kilogramos. “El motivo es que animales muy inferiores o superiores, no son comercializables, por eso no es solo la mejor canal sino aquella con mejor valorización”, explicó.