Al cierre de abril, los principales rubros de la agricultura (arroz, trigo, cebada y oleaginosos) tenían créditos por un total de US$ 330 millones con la banca pública y privada, unos US$ 77 millones más que igual mes del año pasado, según se desprende de las cifras que publica el Banco Central del Uruguay (BCU).

La proporción de préstamos vencidos tuvo un incremento desde la pasada primavera y se ha sostenido sobre unos US$ 11 millones, asociado al impacto natural que tuvo una pésima cosecha de verano en la campaña anterior.

En abril, el volumen de créditos en condición de mora se ubicaba en el 3,4% del total, algo más de 1 punto por encima de abril 2023 (1,2%).

Los créditos dentro de las oleaginosas (soja, colza, carinata) totalizaban US$ 157 millones al cierre de abril, y era principal tomador de financiamiento con la banca privada. El monto de préstamos vencidos de ese subsector llegaba a los US$ 10 millones, un aumento expresivo si los compara con los apenas US$ 100 mil de hace un año atrás. La pasada campaña de verano provocó un duro impacto por una de las peores sequías que se tenga registro, y que dejó como saldo el peor rendimiento productivo desde 1998 para la soja con menos de kg/ha 700.

El cultivo de arroz tenía al cierre de abril préstamos por un total de unos US$ 140 millones, unos US$ 10 millones más que hace un año atrás, pero con una proporción muy menor en condición de vencidos (US$ 1 millón).

Finalmente, en el caso del trigo el financiamiento previo al arranque de la zafra llegaba a unos US$ 21 millones, y de US$ 3 millones para el caso de la cebada. En ambos casos, con una cartera de créditos vencidos prácticamente nula.