Tras cerrar por debajo de los US$ 10 en la última semana de ventas del mes de abril, con un tipo de cambio que jugó negativamente para quienes observan el mercado lanero australiano en dólares estadounidenses, esta semana, con la caída de la moneda norteamericana se logró revertir parte de las pérdidas y volver a superar esa referencia, con un indicador que en dólares australianos no ha parado de subir.
Las preocupaciones que generan cierta incertidumbre en el mercado lanero continúan siendo las mismas: el impacto de la inflación sobre la decisión del consumidor final tanto en Estados Unidos como en Europa, en esta última con el adicional de la guerra entre Rusia y Ucrania, a lo que también se suman las medidas políticas en China para detener el avance del covid-19, que está mostrando resultados positivos, ya con varios días sin contagios en Shangai.
Esta semana operadores australianos marcaron claramente la presión que realizó la demanda desde China, India y Europa principalmente por lanas finas, de buena calidad y con certificaciones de sustentabilidad y sin el proceso de Mulesing. Esto ante una menor oferta de lanas merino observada tanto en Sidney como en Melbourne, con el centro del norte presentando las dos últimas semanas las menores ofertas de la actual zafra.
El IME cerró la semana a US$ 10,04 por kilogramo base limpia, sumando 10 centavos respecto al pasado miércoles 11 de mayo. En la moneda australiana el mercado cerró en A$ 14,34 subiendo siete centavos.
Ante la oferta semanal de 43.662 fardos, el mercado adquirió el 89,9%. La operativa comercial continúa la próxima semana, con una oferta inscripta de 46.392 fardos, según informó Australian Wool Exchage (Awex), para los días martes y miércoles.