La campaña de maíz 2025/26 en Brasil se perfila con una leve contracción de la oferta y un escenario de precios más contenidos en la primera mitad del año. De acuerdo con proyecciones de Conab, la producción total alcanzaría 138 millones de toneladas, lo que implicaría una caída de 1,5% frente al ciclo anterior.
El ajuste responde principalmente a una normalización de los rindes, luego de una zafra excepcional, así como a las incertidumbres climáticas que pesan sobre la safrinha y a una ventana de siembra más ajustada en algunas regiones.
Con el desarrollo de los cultivos de primera zafra evolucionando de forma regular y con un mayor stock final disponible, no se esperan subas significativas de precios durante el primer semestre de 2026, a diferencia de lo ocurrido en marzo de 2025.
Del lado de la demanda, el crecimiento del sector de etanol aparece como el principal factor de sostén, con nuevos proyectos que comenzarían a operar en 2026 y que tenderían a elevar el consumo interno, especialmente en el Centro-Oeste. En este contexto, el clima se mantiene como la principal variable de atención para el mercado.
La campaña 2024/25 de maíz en Brasil estuvo marcada por un nuevo récord productivo.
Según datos de Conab, la producción total se estimó en 141 millones de toneladas, frente a 115 millones en la temporada 2023/24, lo que representó un salto de 22%.
A nivel global, sin embargo, la producción se mantuvo prácticamente estable, con una estimación del USDA de 1.230 millones de toneladas.
En exportaciones, Brasil se consolidó nuevamente como uno de los principales proveedores mundiales, con embarques concentrados en el segundo semestre tras la cosecha de la safrinha, aunque sin repetir los máximos históricos de campañas previas.
Los precios mostraron una elevada volatilidad. El indicador de Cepea comenzó el año cerca de R$ 73 por saco, alcanzó un máximo de R$ 90,33/sc en marzo en la región de Campinas —el nivel más alto desde abril de 2022— y luego cayó hasta un mínimo anual de R$ 62,73/sc en julio, cuando se confirmaron los volúmenes récord.
Tras un prolongado período de lateralización, los valores retomaron una tendencia alcista hacia octubre, impulsados por la demanda externa, el uso para etanol y raciones, y por un escenario más ajustado para la siembra de la segunda zafra.
Fuente: Agrifatto
