Ovinos
A nivel del mercado interno, la operativa está muy tranquila, o así parece de acuerdo con el diálogo con los distintos operadores y consignatarios laneros. Con comentarios de “estoy quieto”, “sin negocios esta semana”, “semana muy tranquila, con referencias de precios, pero por debajo de lo que veníamos haciendo” y “por acá nada”, los consignatarios definen la situación del mercado.
El mercado de lana en Australia dio inicio al mes de diciembre con un leve descenso del Indicador del Mercado del Este (EMI), que perdió dos centavos de dólares australianos y se ubicó en A$ 11,42 por kilogramo base limpia, mientras que en la moneda norteamericana perdió siete centavos y cerró en US$ 7,34.
Este movimiento marca un patrón constante de fluctuaciones mínimas en las últimas semanas, en un contexto donde el sector del vellón Merino fino registró resultados mixtos y las lanas medias y gruesas mostraron un mejor desempeño.
En la jornada de ayer, jueves, al realizar la recorrida por los distintos operadores, consignatarios y referentes de la demanda, el mercado se mostró “muy tranquilo”, con “más oferta y menos demanda de afuera”, según explicó un integrante de la industria topista nacional.
Esta semana, en el mercado lanero australiano, se registró una venta de lanas superfinas en el centro de Sidney, que sumado a la oferta de Melbourne en este tipo de micronajes, impulsó la demanda y los precios, con máximos que llegaron a superar los US$ 17 por lanas de 12,8 micras.
El mercado lanero interno continúa con operativas en los diferentes micronajes, con consultas de los productores que a medida que se acerca el final del año, han tomado posición de venta, pero se encuentran con una demanda que procura ir liquidando los negocios ya concretados con plazos que vencen en el mes de diciembre, y plantea plazos de 60 a 90 días para los nuevos negocios.
El mercado lanero australiano cerró esta última semana con el Indicador de Mercados del Este (IME) en US$ 7,43, perdiendo tres centavos, pero se ha mantenido relativamente estable en esta zafra, con una variación diaria que no supera los 14 centavos, tanto al alza como a la baja. En este sentido, la primera venta de la zafra, el 2 de julio, el indicador cotizó en US$ 7,50, es decir que más allá de la sensación, ha perdido únicamente siete centavos.
Entre enero y octubre de 2024, las exportaciones de lana y productos de lana crecieron 21% en valor, alcanzando los 131,9 millones de dólares, mientras que las de carne ovina sufrieron una caída del 26 %, generando 55,8 millones de dólares. Estos resultados reflejan un año de altibajos marcados por la creciente demanda de países asiáticos y la diversificación de destinos en Medio Oriente.
El año 2024 ha sido claramente desafiante para el rubro ovino en general y para el merino en particular en la zona norte. Se han observado mortandades importantes en ciertas categorías, principalmente por problemas parasitarios, y en algunos casos, se ha dicho por parte de algunos productores que la oveja merina, tras el afinamiento de sus lanas, ha perdido rusticidad para enfrentar este tipo de situaciones.
Las variaciones del tipo de cambio tras las elecciones en Estados Unidos han influenciado el mercado lanero australiano esta semana, donde las subas registradas en el Indicador de Mercados del Este (IME) en la moneda local, se convirtieron en pérdidas al analizar el mercado en dólares estadounidenses.
El mercado lanero uruguayo continúa con la concreción de negocios en lanas merinas, donde el productor está más predispuesto a aceptar los valores propuestos por la demanda, pero las diferencias se encuentran en los plazos. Mientras el productor necesita vender en un plazo de 30 días, para hacerse de capital para final de año, de manera de hacer frente a compromisos económicos, desde las industrias, los planteos van de 60 a 90 días para el pago.