Ovinos
Las certificaciones en el mundo de la lana han venido creciendo en los últimos años, en la búsqueda de brindarle a la fibra natural, el respaldo necesario para responder a las diversas interrogantes de los consumidores finales. En este sentido las industrias uruguayas ya tienen certificaciones especiales que permiten diferenciar nuestras lanas a nivel internacional y esto también está avanzando en el caso de las lanas que se destinan a la exportación en sucio.
El tema no es ajeno al Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) y en una reunión del Grupo de Gestión de la institución se analizó diferentes mecanismos para "incentivar" a los productores a lograr estas certificaciones de manera de lograr un "mayor ingreso por el lote de lana" según dijo a Faxlana el coordinador del área de esquilas, Tec. Agr. Carlos Piovani.
El mercado lanero a nivel internacional se encuentra en receso hasta el próximo martes 4 y miércoles 5 de agosto con una oferta de 36.131 fardos inscriptos, a comercializarse en los tres centros de ventas australianos.
Esta quietud también se refleja a nivel de los negocios en el mercado interno, sin embargo a medida que avanza la cosecha de lana también se incrementa el trasiego de camiones con la fibra hacia los diferentes operadores de la demanda, llámese industria o exportación en sucio.
Como es tradicional, luego de las dos primeras semanas del comienzo de la nueva zafra lanera, el mercado australiano entro en su receso invernal, que este año se prolonga hasta la semana que da inicio el 3 de agosto. A pesar de haber caída un 30% respecto al inicio de la zafra pasada el Indicador de Mercados del Este (IME) también comenzó con subas en este nuevo período de comercialización, tras cerrar a US$ 7,87 el pasado miércoles 8 de julio.
A nivel del mercado interno uruguayo no se han registrado operativas en la última semana, de acuerdo con operadores e integrantes de la industria consultados. Tampoco la Unión de Consignatarios y Rematadores de Lana del Uruguay, y el Secretariado Uruguayo de la Lana han emitido referencias de valores.
En los escritorios rurales crece el nivel de consulta por parte de los productores para intentar tener referencias de negocios, sin embargo la baja operativa a nivel internacional mantiene a la demanda retraída y los valores que se mencionan se encuentran muy lejos de las expectativas que tienen los productores, que aún sostienen en la memoria los valores de comienzos de la zafra pasada.
La Lic. María de la Paz Bottaro, analista de mercados del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) dialogó con Tardáguila Agromercados sobre el momento actual del mercado de la fibra y pequeños signos de reactivación en las exportaciones, pero que aún no se reflejan en el mercado interno.
El Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), emitió algunas recomendaciones para los productores, a aplicarse en los meses de julio y agosto.
El SUL explica en su comunicado que se debe coordinar la ecografía entre 70 a 100 días de inicio del servicio o en su defecto, entre los 30 y 60 días de retirados los carneros.
También, se recomienda mejorar la alimentación de ovejas en baja condición corporal y ovejas gestando mellizos, con pasturas y granos.
La primera semana de la zafra lanera 2020/2021 cerró con Indicador de Mercados del Este (IME) estable respecto al cierre de la semana pasada, luego de un tipo de cambio que generó bajas y subas en la moneda norteamericana, sin embargo lo más importante de la semana ha sido el posicionamiento de la demanda adquiriendo el 95% de la oferta presentada por los productores australianos.
El mercado lanero en nuestro país continúa sin operativas y la zafra de esquila preparto ya ha comenzado. Los productores muestran señales de preocupación respecto a las condicionantes climáticas que se vienen registrando tanto para las pariciones de corderos como también para los ejemplares recién esquilados, principalmente en aquellos casos donde se pasa por la máquina toda la majada.
Esta semana cerró la zafra lanera 2019/2020 en Australia, con un Indicador de Mercados del Este (IME) que registró una caída del 35,7%. En la última venta de junio de 2019 en indicador cerró en US$ 11,99, mientras que este miércoles cotizó a US$ 7,71, perdiendo US$ 4,28 por kilogramo base limpia en dicho período.
El mercado que registró un mayor ajuste en la segunda mitad de la zafra a raíz de la pandemia del Covid-19 y el párate mundial de la economía que golpeó fuertemente la industria textil.
La semana lanera volvió a registrar un nuevo descenso en el Indicador de Mercados del Este (IME) luego de dos jornadas de ventas donde la oferta fue un 77,4% superior a la semana anterior, con una calidad de la oferta que continúa siendo deficitaria en cuanto a calidad.
El mercado registró bajas el primer día de actividad, pero luego un mejor posicionamiento de la demanda ha definido un incremento un incremento en los valores de los fardos de mejor calidad y mantuvieron aquellos de menor estilo.